Los responsables regionales del sector sanitario de UGT y CSIF, José Manuel Castillo y Margarita Ferreras, anunciaron hoy en una rueda de prensa el inicio de una campaña de recogida de firmas entre el personal del Servicio Cántabro de Salud (SCS) para extender a todos sus trabajadores la reducción de la jornada laboral que el reciente Pacto por la Sanidad en Cantabria sólo concede al personal de enfermería del turno de día y del rotatorio.
Castillo y Ferreras reprocharon a la Consejería de Sanidad y a los sindicatos que firmaron el Pacto por la Sanidad de Cantabria que hayan avalado “un agravio comparativo inaceptable”, en alusión a la reducción de jornada estipulada exclusivamente para parte del personal de enfermería, que en realidad suprime la ampliación que la Administración hizo en su momento, de 35 a 37,5 horas semanales, en las medidas de ajuste por la crisis económica.
“Estamos de acuerdo en que se reduzca la jornada laboral al personal de enfermería pero siempre y cuando se haga lo mismo para todos los demás trabajadores del Servicio Cántabro de Salud”, matizó el responsable regional de Sanidad de UGT, antes de que su homóloga de CSIF recalcase que “si en su momento se amplió la jornada a todo el personal, lo lógico y lo justo es que ahora se le reduzca a todos”.
UGT y CSIF plantean al respecto que la jornada laboral se reduzca en 12 horas para todos los trabajadores del turno de día (de 1.652 a 1.638 horas anuales) y en 21 horas a los del turno rotatorio (de 1.537 a 1.516 horas).
Brindis al sol sin cuestiones importantes
Los responsables de UGT y CSIF en el sector sanitario añadieron más críticas al Pacto por la Sanidad, que ambos sindicatos no firmaron, entre otros motivos porque “no deja de ser un brindis al sol, un documento abierto que incluye entre sus prioridades cuestiones que ya se están aplicando, otras que se remiten a largo plazo y, lo que es más importante, obvia la negociación de temas de suma importancia por las que llevamos luchando desde hace tiempo”.
Entre esas cuestiones no incluidas en las prioridades de negociación del Pacto por la Sanidad, Castillo y Ferreras citaron la recuperación de la paga extraordinaria de 2012 que la Consejería prometió pagar este mes y no lo ha hecho, la restitución de los días libres por antigüedad, la desaparición de los descuentos salariales de las bajas por enfermedad, el acuerdo de permisos y vacaciones y que todas las plazas vacantes por jubilación se cubran porque se está reduciendo el personal disponible”.
“Es paradójico y más que criticable que el Pacto por la Sanidad no mencione estas cuestiones importantes y, sin embargo, profundice en la privatización del sistema sanitario público al mantener los conciertos o que incluya temas de negociación que la Consejería de Sanidad no ha querido abordar en estos últimos años, lo que da que pensar y mucho, porque ya es extraño que ahora quiera hacerlo al final de la legislatura”.
En opinión de los responsables regionales del sector sanitario de UGT y CSIF, “plantear ahora estas cuestiones pendientes de negociación en la mesa sectorial va a ser más que difícil porque la Consejería de Sanidad tiene un cheque en blanco para negociar sólo lo que le interesa y remitirse exclusivamente a aquellos temas incluidos en las prioridades del Pacto por la Sanidad”.
“Ahora la Consejería nos dirá que se negociará primero lo que está estipulado en el Pacto por la Sanidad y además tendrá el aval de tres organizaciones sindicales”, subrayaron José Manuel Castillo y Margarita Ferreras en alusión a los tres sindicatos que lo firmaron (CCOO, ATI y SATSE).
