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Durante el año 2013 las pensiones no han dejado de perder poder adquisitivo. Solo en el último mes (octubre) se estaría ganando poder de compra, mientras que durante el resto del año la pérdida ha sido una constante.
Además, los precios se han situado muy por encima de ese límite del 0,25% que el Gobierno quiere aplicar para el año 2014, por lo que si se repite una evolución similar el año que viene, las pensiones sufrirán una pérdida de poder adquisitivo continua, recogida, a título de ejemplo, en el siguiente cuadro:
Pero UGT denuncia que a partir del año 2014 la situación será aún peor si se aprueba la reforma que pretende imponer el Gobierno, ya que no se contempla el factor corrector, tal y como sucede actualmente. De esta manera, el sindicato recuerda que con la actual Ley de Seguridad Social, en su artículo 48, si el dato definitivo del mes de noviembre superaba el incremento establecido para ese año, los pensionistas recibían una paga compensatoria con la diferencia (antes del mes de abril del año siguiente), de modo que pudieran seguir manteniendo su poder de compra.
Sin embargo, la nueva reforma del Gobierno del PP, en la normativa que regula el Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP), no contempla ningún tipo de mecanismo de ajuste o corrector, por lo que la pérdida de poder adquisitivo no será nunca compensada y se perpetuará en años posteriores.
En este sentido, UGT manifiesta que tras la implantación del IRP actuará una fórmula matemática que toma en consideración una serie de variables del sistema, aplicándose, además, unos límites máximos y mínimos cuando el resultado supere o quede por debajo de un cierto valor. Así, para el año 2014 entrará en funcionamiento el límite mínimo del 0,25%, por lo que si el IPC de noviembre queda por debajo de ese valor (tal y como es probable que suceda) se corre el riesgo de que el Gobierno mantenga que se va a producir una ganancia de poder adquisitivo de los
pensionistas. Algo que para el sindicato es, a todas luces, un análisis ilusorio e irreal.
La realidad es que con esta reforma, los pensionistas de nuestro país, presentes y futuros, van a seguir perdiendo poder adquisitivo, porque no van a poder hacer frente a las subidas de la luz, el agua, la electricidad, los medicamentos y los alimentos básicos con su pensión. Una pensión que se va a ver reducida año a año con esta fórmula y que castiga a nuestros ciudadanos cuando hay déficit pero también cuando hay superávit.
Por ello, UGT exige la retirada inmediata de esta reforma, que se ha aprobado de manera unilateral, ya que no ha habido ni diálogo ni negociación con los interlocutores sociales, y que debilita el sistema público en favor del negocio privado, dejando las pensiones a merced del nivel económico de cada cual y del esfuerzo de ahorro de cada ciudadano, generando una mayor desigualdad.
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NO a esta reforma de pensiones
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